¿A dónde me llevas menesteroso subconsciente?
Lazarillo de un corazón célibe y mentecato.
Arrojado quedaste
como el vómito dulce de una abeja obrera
que los hombres consumen entre rodajas de pan.
Deja de dictarle palabras regurgitadas a mi teclado
y abre la puerta para que entre luz a tu alcoba
quemando así los demonios de sacarina
y queden en libertad los conspicuos ángeles torturados.
David Morán
Tegucigalpa
Julio 2010.
Arrojado quedaste
como el vómito dulce de una abeja obrera
que los hombres consumen entre rodajas de pan.
Deja de dictarle palabras regurgitadas a mi teclado
y abre la puerta para que entre luz a tu alcoba
quemando así los demonios de sacarina
y queden en libertad los conspicuos ángeles torturados.
David Morán
Tegucigalpa
Julio 2010.
2 comentarios:
Atractivo fulgor en la nueva cara de neurocosmos.
Amigo Mickel:
A ver si eso mismo dicen de su contenido.
Saludos.
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