domingo, abril 24, 2005

Vangelis



Los dioses no han muerto, ahora estimulan nuestros sentidos, encontraron un cable disociado por donde escabullirse del mito a la realidad, conservando incólume su anonimato, nos contemplan y manipulan con arto capricho.

Júpiter camina por rieles que, de forma tan ingenua, dejamos plantados en esta mística tecnológica de baladros sintéticos. Ya no se conforma con lanzar saetas de electrones en una tarde tempestuosa, ni se complace con incinerar a uno que otro transeúnte negligente, es demasiado aburrido.

Han querido ser piadosos (para variar) permutan sus triquiñuelas en arpegios electrónicos. La tragedia y la muerte son cosa común, es mejor embelesar el oído escuchando el humor de la galaxia, es mejor utilizar a su pequeño instrumento humano, ese, ahora viejo y siempre barbudo, músico griego, Vangelis.



Las ondas entran en tus oídos, se diluye a través la corteza; comienzan las imágenes:

El tacto responde al ritmo mágico, la endorfina te disocia del ambiente. Te ves atrapado en aletazos de sirena, avistando esa niña del mar que agasaja la rosa de damasco. Máscaras, comenzaron los bailes extravagantes, es el festival de las almas.

Voces, ecos, responden las montañas en su sueño de plaza abierta. Conquista este paraíso de resonancias estridentes. Vas tan rápido en tu carroza de fuego, tu estrella pulsa una y otra vez en el neurocosmos, explota la súper nova, es la balada del hombre desconocido. Escribe pues, tu página de vida.



Las memorias de lo verde son tan largas y tan claras. Tomas el teclado y escribes, una pausa para beber la efigie del sonido gravitacional que cae en espiral, luego sigues escribiendo. Te estremeces con el vapor de la clarividencia, ves el Apocalipsis de los animales ¿Están el cielo o en el infierno? Agachas la cabeza y continúas tecleando cosas raras que sólo tus manos entienden. Te detienes, escuchas a una muñeca mecánica que se ruboriza al verse perdida en la ciudad; imagínala. Ella me dice, cuando canta la ópera salvaje: “Nos vemos luego”. Adiós Mithodea, le digo yo, vuelvo al mundo de los seres humanos. Vuelvo a estar jodido.

Terminó el concierto, me caigo de la silla, la computadora colapsa. Todo acabó..

Simples experiencias que se consiguen con un trozo de estrellas.
Es la música de los dioses, es Vangelis.

Tal vez mucho mas...

Fecha de expiración: Albedo 3.15-directo.
Zone: antártica. Del Greco.

Fotos de:
www.artistdirect.com/.../ album/0,,199257,00.html
http://img.mp3spy.ru/images/2003060212120439817_1.jpg
http://hem.spray.se/n.wallin/vangelis/bilder/Vangelis2.gif

10 comentarios:

cintya dijo...

Muy buenoooo!!!!, muchas gracias por visitar mi blog, espero verte pronto...
Saludos

Luis Amézaga dijo...

Vangelis, en mi opinión no se merece tus espléndidas palabras. A mí el médico me lo desaconsejó porque me subía los niveles de azúcar.

Unknown dijo...

Tu visita a mi blog me llevò a leerte y a confirmar la naturaleza de lo escrito... vaya!, es denso, pero bueno. Merece mayor atenciòn.

Anónimo dijo...

Esta de más que diga algo sobre Vangelis.

Me quedé volando en el espacio por unos instantes, para escribir estas cosas y otras que tengo escondidas por ahí.

Lo malo es que no las puedo encontrar.

¿Serán necesarias?

Tbo dijo...

No se lo que has fumado, pero pasa un poco..., Camarero A mi pongame lo que toma ese..., la efigie del sonido gravitacional, en taza grande, please..., Saludos.

Anónimo dijo...

Sabía que alguien saldría con esa ocurrencia, bien pensada. Esta música la ocupo para trabajar en algunas cosas, me reconforta y ajusta. Es buena compañera. Ya sabes que pedirle al camarero, en el post están clavadas algunas bebidas del menú. Para experiencias fuertes, te recomiendo Mithodea Tbo. Saludos.

Anónimo dijo...

Tranquilo, no es para tanto... es un buen compositor, pero puede empalagar

Anónimo dijo...

Me ha encantado tu escrito. Yo descubrí a Vangelis a los 10 años, después de ver Blade Runner (entonces no entendí mucho la peli), pero la música... Desde entonces (aunque me gusten también otros autores y grupos musicales)solo me relajo, duermo y sueño con las maravillas que muy bien has descrito.

Unknown dijo...

Luis, ¿que Vangelis no se merece estas espléndidas palabras?. No me eixtraña que tu médico no te lo haya recetado, pues no eres apto para atmósfeas muy altas.

Vángelis tiene un agudo sentido de hablarte al oído, a través de una gama inmensa de frecuencias. Sabe perfectamente como hacer que visualices a través de tu oído.

Unknown dijo...

Luis, ¿que Vángelis no merece espléndidas palabras?. No me extraña que tu doctor no te lo haya recetado, pues no eres apto para atmósferas de muy alto nivel.