Existen a mí entender cuatro grandes virtudes descubiertas por los seres humanos, mismas que le son inherentes a todos y cada uno:
La verdad, la justicia, la libertad y el amor.
No puede existir la justicia sin la verdad.
Sin la libertad no puede existir el amor.
Y sin la verdad y el amor no puede haber vida dentro del alma humana.
Asimismo, existen cuatro pesares que también forman parte de nuestra naturaleza.
La mentira, la corrupción, la opresión y el odio.
Pero ninguna de ellas es tan perniciosa como el miedo.
Pues gracias a este inesperado y último elemento se ensancha el reino de la iniquidad.
En cada humano existe la facultad de traer luz al mundo.
En cada humano existe la facultad llevar al mundo a la perdición.
Todo dependerá de la ausencia o la presencia del elemento desequilibrante.
Autor: David Morán Tegucigalpa Abril 2007
La verdad, la justicia, la libertad y el amor.
No puede existir la justicia sin la verdad.
Sin la libertad no puede existir el amor.
Y sin la verdad y el amor no puede haber vida dentro del alma humana.
Asimismo, existen cuatro pesares que también forman parte de nuestra naturaleza.
La mentira, la corrupción, la opresión y el odio.
Pero ninguna de ellas es tan perniciosa como el miedo.
Pues gracias a este inesperado y último elemento se ensancha el reino de la iniquidad.
En cada humano existe la facultad de traer luz al mundo.
En cada humano existe la facultad llevar al mundo a la perdición.
Todo dependerá de la ausencia o la presencia del elemento desequilibrante.
Autor: David Morán Tegucigalpa Abril 2007
4 comentarios:
Lo que me pregunto es si existen gracias a nosotros, o a pesar nuestro.
Amigo Mickel:
Supongo que son ambas cosas, y de todas ellas la humanidad vive.
Saludos
!Miedo yo¡, ni hablar. Bonito post, espero tener una lucecita en mi corazón. Un abrazo.
La mentira...es empezar de niño y como no te corrijan ya no paras... :)
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