lunes, julio 18, 2005

Arte: ¿Velocidad y Belleza?


Hablemos del arte, ese que se manifiesta en las formas elementales y cuyo concepto descubrieron, no por casualidad, nuestros antecesores de piedra, hierro y bronce. Miremos ahora una adaptación de conjuntos fascinantes e ingeniosamente amalgamados, todo gracias a la pericia de manos artesanas. Vemos una de esas variaciones rodar por alfombras negras cuya materia es la herencia perenne de nuestra historia evolutiva.

Independientemente de su piel de aluminio o fibra de carbono, más allá del status social (un efecto emocional que te hace saltar y ver por encima de los demás) o le prestigio que nos proporcionan ciertas cosas, vemos como las formas delineadas romper el viento y se afanan en dominar la velocidad. Al igual que la aves, los peces, los inquietos mamíferos y otros caprichos de Dios, también está debidamente adaptada, producto quizá de los sueños que pensamos y que hoy soy una hermosa realidad.

Lejos del abolengo real de todo don que apunta a esculpir y enaltecer la mujer y al hombre, aquí estamos, atendiendo el rugido de un corazón colérico sin otra razón más que rebasar a todo aquello que esté por delante, y sin embargo ¡Con qué delicadeza y elegancia se mueve!



Reconozco el milagro de la ingeniería, no a través de los costos, sino por el arco perfecto (esa, esa palabra que muchos temen adjudicar) que se desprende de un destello delirante; miremos nuestros puentes, nuestras catedrales, nuestros parques, nuestros cafés, nuestras máquinas. Expresan lo que somos. Ellas nos sobrevivirán y hablaran de nosotros, de lo que hemos sido y en lo que al final acabaremos.

Es una verdad que tampoco sea aficionado de corazón por este estilo, lo admito con humildad (sinceridad y sencillez a secas, sin pretender ganar simpatía), quiero simplemente homenajear algo como lo que es, no como se quieren que se vea.

¿Inaccesible para la masa? Puede ser, ¿En manos de quién? De eso no trata este post. Viajemos pues, en libertad, sin el prejuicio de un resentido social, sentémonos delante del timón y disfrutemos, que esta pequeña maravilla artística nos llevará a un hermoso viaje al centro de nuestras mentes.


No es suficiente con poseer la piedra preciosa que otros no tienen, también hay que aprender a apreciarla, de lo contrario seremos los dueños de algo que nunca pudimos valorar de forma genuina, ni mucho menos amar.

David R. Morán
Tegucigalpa
Julio 2005
astonmartins.com

8 comentarios:

Luis Amézaga dijo...

"Les metería todas las marchas a esas bellezas" Pero no se dejan.

scape95 dijo...

La verdad es que son bonitos... Casi tanto como tu post ;)

Anónimo dijo...

Hola, sigo visitandote, no tan seguido te mando un beso cuidate

OdinGhost dijo...

me enganchaste justo!!!
no se donde me habrás sacado la foto!!!! (las ganas, no?)
muy bueno David,
Saludos

Michi dijo...

Y yo sin carnet de conducir!!! Pero esas fotos me han animado a sacarmelo ;-)

Tbo dijo...

¿Donde esta la rubia?, a ese coche le faltan las curvas. No le iria mal una rubia o tal vez una morena. El motor siempre me suena mejor con dos que con una y no se te puede dejar el coche.

David Morán dijo...

Disculpa amigo Tbo por no incluí en este post a una rubia, lo he dedicado a las máquinas como estilo artrítico.

Pero si tengo para todos mis amigos un enlace especial, chicas hermosas para su pantalla de computadora en www.desktopgirls.com o hacer clic en el enlace que tengo en la sección “Links”.

Tbo dijo...

Ummm, que bien, se agradece...