Caminan por la noche de los desaciertos
bajo la esperanza en vilo de cuarto menguante.
Las horas garrapatean remedios infectos
sobre planicies desafortunadas.
Ellos se rascan las narices, se chupan el dedo
para reafirmar aquella desgracia,
maldiciendo el anhelado sabor que no se siente
en sus tristes bocas con sonrisas desdentadas.
David R. Morán.
Tegucigalpa, Enero
2008
5 comentarios:
Por eso algunos apuestan por evitar los deseos, la única forma de librarse de las frustraciones.
Por supuesto, que la idea del desprendimiento libra de frustraciones a muchos, pero a falta del deseo no veo el dónde ni el cómo podamos emprender el avance.
Saludos.
Ahora mismo estoy frustradisimo...he perdido el rebote bursatil, Michi arruinado!!!!!!!!!!! Agh!!!!!!!! Frustracin en estado puro...
Feliz año David!!
Ya son dos blogueros a los que veo con esa frustración. Ojalá y las cosas mejoren con el tiempo en el mercado bursátil.
Igualmente feliz año para usted, Don Michi. Me alegra saber de usted.
¡Cuántas planicies desafortunadas se pueden transitar en el recorrer de una vida!
Por ausencia de deseo o por exceso de ello.
El deseo de que las cosas sean diferentes a como son, es la causa del sufrimiento.
El avance comienza sólo cuando existe el impulso de encontrar otra opción.
Un abrazo para tí
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