miércoles, enero 02, 2008

Techos de Fuego


Rebrota del fango la dulce quimera
que al ocaso duele cambiar por luces pendencieras.
El cielo se quiebra en arrumacos polares
y del orbe llueven ilusiones fugaces
rompiendo sus alas sobre las llagas de tu tierra.
Ahí te comienzo, del ombligo inmolado
parte los puntos cardinales de la ciencia,
del todo, del saber y del desconocimiento
que nuestras fuerzas apenas llena.

David R. Morán
Tegucigalpa
Enero 2008

Foto de:
www.iac.es/educa/leo99/historia.html

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Me impresiona este poema por la metáfora utilizada para lograr esa impecabilidad, en el sentido de lo que quieres transmitir... La dulce quimera es como la flor de loto, que deslumbra a quien la vé florecer...

Un abrazo para tí y me alegra mucho tu regreso al blog. Buen comienzo David ;)

Luis Amézaga dijo...

¿Rimando? Usted no solía. :)

David Morán dijo...

Raizen, a veces me dejo deslumbrar.

Amigo Mickel:
Por lo general no "riméan". ¿Será que entro en decadencia?

Saludos.

Tbo dijo...

Esto es como mirar un cuadro, Poesía moderna..., te ha quedado muy bien y que cada uno la interprete a su manera

David Morán dijo...

Gracias Tbo, ojalá veamos mas de tus escritos pronto.

Saludos.